Tikal Natural 2018 Tikal

Tikal Natural 2018 – Pura expresión de la biodinámica andina

Una cuvée sin concesiones, de viñedos biodinámicos certificados

Tikal Natural 2018 representa el lado más radical y auténtico de la filosofía de Ernesto Catena. Elaborado a partir de uvas Malbec y Syrah cultivadas con prácticas biodinámicas certificadas, sin químicos de síntesis ni sulfitos añadidos. Es una declaración clara: mostrar cómo la identidad del terroir puede emerger sin filtros, del viñedo a la copa. La fermentación es espontánea, con maceraciones prolongadas, para expresar un carácter vivo, vibrante y en constante evolución.

Filosofía en el viñedo y enfoque en la bodega

Las uvas provienen de parcelas en el corazón del Valle de Uco, a más de 1.100 metros de altitud. Allí, el aire puro, los suelos pedregosos y la marcada amplitud térmica crean condiciones ideales para obtener frutos sanos y concentrados. El cultivo biodinámico fomenta la vitalidad del suelo y el equilibrio de la vid, con intervenciones mínimas y respeto por los ritmos lunares. En bodega, Tikal Natural 2018 se vinifica sin sulfitos añadidos, con maceraciones suaves y crianza en barricas neutras para preservar la pureza varietal.

Notas de cata

Color rubí profundo con reflejos violáceos. En nariz presenta ciruela madura, violeta, pimienta negra y matices terrosos. En boca es fresco y enérgico, con taninos integrados y un final sabroso, ligeramente salvaje.

Maridajes recomendados

Ideal con platos especiados y sabrosos como tajine de cordero, cuscús con verduras asadas o hamburguesas vegetarianas de lentejas y champiñones. También acompaña quesos de corteza lavada y cocina natural.

Ficha técnica

• Denominación: Mendoza, Argentina

• Añada: 2018

• Variedades: 60% Malbec, 40% Syrah

• Agricultura: Biodinámica certificada

• Vinificación: Fermentación espontánea, sin sulfitos añadidos

• Crianza: 10 meses en barricas usadas

• Alcohol: 13,5%

• Producción: Limitada

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Tikal – Visión artística y biodinámica en el corazón de Mendoza

Un proyecto de Ernesto Catena: arte, naturaleza y vino

Tikal se encuentra en Vista Flores, en pleno Valle de Uco mendocino. Fundada por Ernesto Catena, hijo del reconocido Nicolás Catena, esta bodega fusiona creatividad, conciencia ecológica y filosofía biodinámica. Ernesto ha impregnado el proyecto con su pasión por el arte, la naturaleza y la identidad latinoamericana, dando lugar a una bodega con personalidad fuerte y auténtica que expresa fielmente el carácter del terroir andino.

En el viñedo: armonía con la naturaleza

Los viñedos de Tikal, situados entre los 1.000 y 1.200 metros de altitud, se cultivan bajo principios orgánicos y biodinámicos, sin químicos de síntesis. Las plantas crecen en un entorno biodiverso, respetando los ciclos lunares y las energías cósmicas. Las intervenciones son mínimas y buscan preservar el equilibrio natural del suelo, permitiendo al terroir andino expresarse plenamente. La altitud, la fuerte amplitud térmica y los suelos pobres aseguran uvas de gran concentración y frescura, ideales para vinos intensos y longevos.

En la bodega: pureza, intuición, identidad

La elaboración en Tikal adopta un enfoque de mínima intervención, con atención artesanal a cada micro-parcela. Las fermentaciones suelen ser espontáneas, en acero o cemento, y la crianza se realiza en barricas de diferentes orígenes y tamaños. La bodega fue diseñada siguiendo la proporción áurea, para potenciar la energía natural del lugar. Los vinos de Tikal tienen un estilo propio—elegante y potente—con etiquetas que narran historias y símbolos inspirados en culturas precolombinas y mitología andina.

Cuvées emblemáticas

Tikal Amorio es un Malbec puro, jugoso y profundo. Tikal Patriota combina Malbec y Bonarda, con un perfil vibrante y especiado. Tikal Natural, certificado biodinámico, es un vino honesto y vivo, sin sulfitos añadidos. Para quienes buscan estructura y complejidad, Tikal Júbilo ofrece una mezcla de Malbec y Cabernet Sauvignon rica y con gran personalidad.

Proyección internacional y visión holística

Los vinos de Tikal se exportan a todo el mundo, como embajadores de la nueva vitivinicultura argentina, enfocada en la sostenibilidad, la pureza del fruto y la identidad cultural. La bodega es también una experiencia sensorial: paseos a caballo entre viñedos, laberintos vegetales, arte a cielo abierto y un entorno natural que une paisaje y espiritualidad. Tikal representa una visión holística del vino y de la vida.