Otium 2023 Pèira Levada

Otium 2023

El equilibrio entre potencia y finura del Languedoc por Pèira Levada

Otium 2023 es un vino tinto elegante y estructurado de Pèira Levada, elaborado con una mezcla de variedades tradicionales del sur de Francia: Garnacha, Mourvèdre, Cariñena y Cinsault. Esta cuvée expresa la riqueza y complejidad del terroir del Languedoc, destacando el carácter auténtico y territorial de la uva con un enfoque respetuoso hacia la naturaleza.

Filosofía en el viñedo

Las uvas provienen de viñedos cultivados orgánicamente y biodinámicamente en suelos pedregosos y minerales. La vendimia manual y la selección rigurosa aseguran la máxima calidad, mientras que la biodiversidad se promueve mediante prácticas sostenibles que mantienen el equilibrio natural.

Enfoque en bodega

En bodega, se realizan fermentaciones espontáneas y largas maceraciones en depósitos de cemento y barricas de roble neutro, sin adición de levaduras seleccionadas ni aditivos químicos. La crianza sobre lías finas potencia la complejidad y suavidad, evitando filtración y sulfitos añadidos para preservar la pureza y vivacidad.

Color: Otium 2023 presenta un rojo rubí intenso, profundo y brillante.
Nariz: Aromas de frutos rojos maduros, especias dulces y notas terrosas emergen en nariz.
Paladar: En boca es completo, envolvente y bien equilibrado, con taninos suaves y un final fresco y largo.

Ficha técnica

• Añada: 2023

• Variedades: Garnacha, Mourvèdre, Cariñena, Cinsault

• Zona: Languedoc, Francia

• Vinificación: Fermentación espontánea en cemento y roble neutro

• Crianza: Sobre lías finas sin filtración

• Sulfitos: Mínimos, no añadidos

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Pèira Levada

Naturaleza, profundidad y terroir puro en el corazón de Faugères

En el corazón del Languedoc, entre las colinas de Cabrerolles, se encuentra Pèira Levada, un pequeño domaine fundado en 2018 por Alexandre Durand, un joven viticultor inspirado por una idea simple pero radical: devolver a la viña y al vino su voz original. El nombre hace referencia a las “piedras levantadas”, grandes afloramientos rocosos en los suelos de esquisto de la zona, símbolo de fuerza y permanencia.

Filosofía en el viñedo

Los viñedos de Pèira Levada cubren aproximadamente cuatro hectáreas y media, divididos en pequeñas parcelas entre los municipios de Cabrerolles y Laurens, dentro de la AOC Faugères. Los suelos son un mosaico de esquisto, marga y caliza, que proporcionan a los vinos profundidad y verticalidad. Las variedades cultivadas son las históricas del sur: Syrah, Garnacha, Cinsault, Carignan, Mourvèdre.

Alexandre trabaja la tierra con prácticas orgánicas y biodinámicas (no certificadas), sin laboreo ni herbicidas, permitiendo que la cubierta vegetal espontánea proteja y nutra los suelos. Las vides se cuidan a mano siguiendo un principio de equilibrio natural: sin forzar, sin riego, respetando solo el ritmo de la planta. La vendimia es manual y selectiva, realizada en cajas para asegurar que las uvas lleguen intactas a la bodega.

Enfoque en bodega

En bodega, la intervención humana es mínima. Cada coupage se vinifica sin aditivos químicos, sin filtración y sin sulfitos añadidos. Las fermentaciones son espontáneas, realizadas con levaduras indígenas, en recipientes neutros (depósitos de fibra de vidrio o cemento) para preservar la expresión pura del vino.

Las uvas se despalillan o se fermentan enteras según la parcela y la variedad. Los tiempos de maceración varían año tras año para cada coupage. Los vinos reposan sin trasiegos innecesarios y se embotellan sin clarificación ni filtración, para conservar intacta la energía de la fruta.

Los vinos de Pèira Levada

Vinos naturales de tensión y profundidad, hijos del esquisto

Los vinos de Pèira Levada son intensos, vibrantes y afilados. Cada etiqueta resulta de un delicado equilibrio entre fruta, mineralidad y ligereza. No hay concesiones a la moda ni a la estandarización: aquí el vino es la expresión pura del terroir, sin máscaras ni artificios.

Coupages emblemáticos como Dynamite, The Velvet Underschiste y Carignan Radical muestran una mano segura y coherente que permanece fiel al fruto y al paisaje. Son vinos para quienes aman el carácter, la acidez viva, la profundidad salina, pero también cierta delicadeza táctil. Vinos que no gritan, pero permanecen en la memoria.